Me resulta curioso que tanto en los primeros post como en el actual el capítulo protagonista sea el de los Ultramarines puesto que, he de reconocer, que nunca les he prestado la atención que debería. La verdad es que con el paso de los años he ido recopilando una serie de piezas de éstos sin premeditación (una muy peculiar manera de formar un bonito y azulado ejército).
La primera imagen es un collage de fotografías del techmarine para que puedan apreiarse los pocos detalles que le añadí para diferenciarlo del resto de sus colegas de batalla. Sobre ésta miniatura en concreto puedo contar que formó parte de la, hoy deseada por muchos, expansión del Space Crusade Mission Dreadnought que con el paso de los años ha ido surtiendo de piezas adicionales a múltiples escuadras y personajes de mis ejércitos. Decidí añadir el símbolo del capítulo en una de sus generosas piernas dejando las hombreras para otros detalles como la mano amarilla (primera marca representativa de los techmarines) y unas siempre socorridas bandas amarillas y negras que posteriormente se repetirían en la línea superior del casco. Pintar en metalizado detalles como la espalda de la armadura (no demasiado apreciable en la foto), partes del generador o la parrilla y toberas faciales fué el recurso empleado para diferenciarlo aun más del resto de los hermanos Ultramarines.
La calidad de pintado de ésta miniatura sería calificada por muchos como bastante mediocre, aun así me hacía bastante ilusión incluirla en éste post puesto a que su historia está fuertemente ligada a la siguiente imagen.
El vehículo de recuperación que os mostraré a continuación fue la primera conversión que realicé sobre el chasis de un Rhino (en realidad en su origen fue un Predator, mi primer Predator!!!) La grúa se realizó partiendo de cero con distintas piezas que van desde bridas de plástico hasta restos de matrices. El cuerpo principal, como podréis apreciar por su sencillez, se construyó con cartón (más socorrido de lo que a muchos les gusta reconocer) y su mirilla frontal es una antigua peana exagonal. En uno de los laterales incluí el detalle de una mano para mostrar que el vehículo pertenece al "departamento de mantenimiento", sobre una peana de la antigua caja de esqueletos de plástico.
- 1º Te fastidias. Tu hermosa pieza ha quebrado y no puedes volver atrás en el tiempo para evitarlo.
- 2º Te lo tomas con filosofía (no ha pasado nada) y lo arreglas. Si eres mañoso sólo tu sabrás que alguna vez estuvo roto.
-3º Afontas el reto (generalmente porque has perdido la dichosa pieza) y reemplazas la parte dañada con ingenio y amor.
Hey! míralo por el lado bueno. Veinte años después Games Workshop sacará tu modelo como un producto oficial y ningún pedantillo brainwashed podrá ponerte pegas a la hora de jugar con él.
Como podéis observar en las fotografías en el esquema de color aplicado al modeo se han empleado tramas de negro para crear un efecto de "camuflaje nocturno".
En próximos post espero poder ir mostrando el resto de tanques que tengo por ahí rondando. De hecho puedo avanzar que el capítulo protagonista del siguiente post será el de los Mantis Warriors y su tanque un Whirlwind (home made) que adquirí hace dos o tres años y cuyo proceso de recuperación fue tan guarrete como curioso.
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